Ore wa Nakama-da

viernes, 6 de febrero de 2009

Sistema de trabajo español

Sistema de trabajo español.

En el año 2006 se celebro una carrera de remo entre empleados de una empresa japonesa y de otra española. Se dio la salida y los japoneses empezaron a destacar desde el primer momento, llegando a la meta con una hora de ventaja sobre el equipo español.
La dirección de la empresa española analizo las causas de tan amarga derrota y advirtió que el equipo japonés estaba compuesto por 10 remeros y un jefe de equipo, mientras que la tripulación española la componían 10 jefes de equipo y un remero, por lo que se decidió adoptar las medidas adecuadas.
En 2007, la tripulación japonesa llego dos horas y media antes que la española, la dirección se volvió a reunir y tras un sonoro rapapolvo a la gerencia, concluyeron que los japoneses habían repetido la estrategia (10 remeros y un jefe de equipo) mientras que la innovadora tripulación española remozada tras las eficaces medidas tomadas el año anterior, estaba compuesta por: 1 jefe de equipo, 2 asesores de gerencia, 7 jefes de sección y… 1 remero.
La conclusión de la dirección fue unánime: el remero es un incompetente.
En 2008 tras encargar una innovadora trainera al departamento de nuevas tecnologías, la ventaja de los japoneses fue de 4 horas. El equipo directivo español reunido para analizar las causas del nuevo desastre comprobó que el equipo nipón había optado por la ya tradicional formación (10 remeros y un jefe de equipo), mientras que el equipo español, tras la auditoría externa y el asesoramiento especial del departamento de organización, opto por una nueva formación mucho más vanguardista: 1 jefe de equipo, 3 jefes de sección con un plus de productividad, 2 auditores de Arthur andersen y 4 vigilantes jurados de Prosegur que no quitaban ojo al único remero de la tripulación, al que habían amonestado y castigado quitándole los pluses e incentivos.
Tras varias horas de reuniones se acordó que para la regata de 2009, el remero fuese becario o en su defecto, una contratación externa, ya que a partir de la vigésimo quinta milla, se había observado cierta dejadez en el remero de plantilla, actitud que rozaba con el pasotismo y con comentarios del tipo “va a volver a remar su puta madre” al llegar a la línea.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jajajajajaj k bueno!!! tiene tol arte!! jejeje es muy diver....